El Gobierno ha sentado las bases del primer Proyecto Europeo para la Recuperación y Transformación Económica que estará relacionado con el apoyo a los coches eléctricos. Tendrá un presupuesto muy amplio que se repartirá en tres años. Esta iniciativa se iniciará con los fondos Europeos que se han concedido para salir de la crisis generada por la pandemia del Covid-19.
El objetivo de la puesta en marcha del PERTE del coche eléctrico es impulsar la movilidad eléctrica en España para que el sector del automóvil siga siendo un referente internacionalmente. El Proyecto Europeo para la Recuperación y Transformación Económica del coche eléctrico contará con varios pilares fundamentales para conseguir el objetivo establecido. Además, es importante destacar que el Presidente del Gobierno ha asegurado que este plan ayudará a la generación de empleo en el sector del automóvil.
Estos son las líneas fundamentales del PERTE del coche eléctrico
Esta iniciativa pondrá el foco sobre la cadena de valor del coche eléctrico. Esto supone que se aumentará el apoyo en investigación, desarrollo, fabricación de baterías, líneas de producción e incluso la fabricación de equipos. El segundo eje pasa por la la construcción de nuevos puntos de recarga para los coches eléctricos y la digitalización de la movilidad.
Estas medidas, según el Gobierno, conseguirán que el producto interior bruto, PIB, suba hasta el 15% en 2030. Además, Pedro Sánchez, ha manifestado que «no se trata que la industria del automóvil vuelva a niveles prepandemia, sino que alcance una posición superior».
Una vez que se apruebe en el Congreso de Ministros, se publicará en el Boletín Oficial del Estado, BOE. A partir de ese momento, las empresas podrán presentar proyectos. Algunas fuentes han asegurado que Seat sea una de las primeras en presentar un proyecto para construir en Martorell una fábrica de baterías para coches eléctricos.
El PERTE del coche eléctrico contará con una inversión total que superará los 24.ooo millones de euros. El sector público tendrá una contribución de 4.300 millones de euros y una inversión privada de 19.700 millones. Este ambicioso proyecto se llevará a cabo para que en 2023 existan 250.000 coches eléctricos ya matriculados y entre 80.000 y 110.000 puntos de recarga.
La consecución de los objetivos dependerán de tres factores; el plan MOVES III, la fabricación de baterías y la infraestructura de carga.