Volkswagen inicia el lanzamiento comercial de su nueva berlina ID.7, la que viene a llenar en su gama eléctrica el espacio de los Passat-Arteon con motores ICE en el nuevo panorama eléctrico del fabricante alemán, un espacio al que aspiran mucho directivos de empresas, que ya piensan en este modelo como su próximo vehículo corporativo,…. Y razón no les falta.
De entrada, el modelo seduce. Aporta una silueta ciertamente atractiva, con formas de coupé, pese a tratarse de un modelo de casi cinco metros de longitud, que sigue los designios marcados por cuantos hermanos le han precedido en la nueva gama eléctrica del fabricante de Volksburg, con la ya característica línea lumínica que une sus proyectores LED en el frontal del coche y abarca estos a modo de ceja hasta alcanzar los pasos de rueda sobre las aletas delanteras.
«Falso» coupé optimizado aerodinámicamente
Los ingenieros de la marca se han esforzado por dotar al ID.7 de la mejor configuración aerodinámica posible para garantizar la menor resistencia posible al aire frontal que recibe mientras avanza sobre el asfalto y mejorar así en lo posible tanto sus prestaciones como su autonomía, que según la marca debería alcanzar los 700 kilómetros según sus mediciones WLTP. En cierto modo podemos decir que lo han logrado, pues así al menos lo atestigua el 0,23 que acredita su coeficiente Cx, logrado en buena medida gracias también a las amplias bocas de entrada de aire abiertas en su paragolpes delantero para reducir la resistencia del vehículo y mejorar la penetración del área frontal del mismo (de nada menos que 2,46 m2) al aire.
Podríamos pasar por alto toda esta información sobre la capacidad aerodinámica de la berlina alemana, pero lo cierto es que en esta nueva era de la movilidad eléctrica la conformación del diseño de los vehículos influye en hasta un 50 por ciento sobre el valor del coeficiente de resistencia, al tiempo que los neumáticos lo hacen en un 30 por ciento y los bajos del coche en un 10 %, mismo porcentaje en el que influye el diseño del frontal, en especial el de las aberturas y oquedades funcionales que han de favorecer la circulación del aire hacia los radiadores ubicados en la parte delantera del vehículo.
Según comenta Daniel Scharfschewerdt, diseñador del coche, “al crear el ID.7 se ha prestado mayor atención a su aerodinámica que en cualquier otro modelo. Esto lo podemos apreciar también en la zona baja de su frontal, en la fluida transición que se aprecia entre el capó y el parabrisas, y en la del final del techo hacia la trasera conformando una silueta coupé afilada en la trasera que también busca con ello ofrecer un rendimiento aerodinámico ideal”.
Llantas y ruedas, objeto de atención
Todo ello se complementa con unos bajos que permanecen prácticamente cerrados en los laterales con la adopción de unos spoilers de nuevo desarrollo justo por delante de las ruedas delanteras que se encargan de guiar los flujos de aire hacia los bajos del vehículo provocando las minimas turbulencias posibles, al igual que los extremos del paragolpes delantero tienen encomendada la misión de orientarlos hacia los laterales desde la delantera provocando la menor pérdida posible. De esta manera, las taloneras laterales evitan que el aire fluya hacia los bajos y protegen a los neumáticos traseros del aire que debería llegarles. Otra serie de pequeños spoilers y paneles embellecedores distribuidos en su carrocería son los encargados de guiar adecuadamente el flujo de aire que circula por los bajos del vehículo para evitar su dispersión.
Todo ello se agradece especialmente en un vehículo eléctrico, donde las ruedas con grandes contribuyentes a la hora de hablar de la eficiencia aerodinámica del vehículo, razón por la cual los diseñadores del consorcio alemán se centraron especialmente en ellas. Así, “al diseñar las llantas la aerodinámica centro nuestra atención —comenta Stephan Lansmann, ingeniero responsable de aerodinámica en el ID.7—tanto para ello como para asegurar el correcto refrigeramiento de los frenos. El resultado son unas llantas más cerradas dotadas de buenas propiedades aerodinámicas que permiten optimizar las variantes menos favorables durante la fase en las que estas se generan”.
En el frontal del coche el aire que fluye hacia los radiadores se controla activamente mediante una persiana en el propio radiador que permite reducir la resistencia aerodinámica. Esta, de accionamiento eléctrico, únicamente se abre cuando se precisa refrigerar las unidades de potencia y la batería del vehículo. En la zaga, la eficiencia aerodinámica se garantiza mediante el diseño del portón trasero, así como el del difusor y sus bordes de separación laterales.
Amplio techo panoramico, sin cortinilla interior
Y como no podía ser de otra manera en estos tiempos que vivimos, la larga línea de techo que ofrece la silueta del ID.7 se aprovecha para ofrecer un techo panorámico solar configurado mediante el uso de un cristal inteligente que carece de cortinilla en su interior. El cristal va variando su tono de manera completamente automática para evitar que al interior pasen tanto los infrarrojos y ultravioletas solares como un exceso de luminescencia que pueda llegar a molestar a los ocupantes mientras se viaja a bordo del vehículo.
En todo caso, tanto el techo como los pilares que lo soportan, con el C simulando la caída habitual en los coupés, van acabados en color negro brillante, con las molduras del marco terminadas en aluminio.
En cuanto a la trasera del coche, su diseño de líneas hortizontales le proporciona una imagen de notoria anchura. Una barra transversal lumínica de LED, con la zona intermedia en color blanco (que se ilumina en color rojo al encenderse las luces), lo recorre de lado a lado. Paragolpes y difusor trasero también se acaban en el mismo color negro brillante de techo y pilares.
Gran distancia entre ejes
Hablamos de un habitáculo conformado a partir de una batalla (distancia entre ejes) de 2,97 metros, una distancia más que notable que habilita al ID.7 para dotarse de una configuración interior en la que la disponibilidad de espacio para los pasajeros es más que notable en ambas filas, especialmente en la trasera donde estos podrán llevar sus piernas sin apreturas frente a los respaldos de los asientos delanteros.
Volkswagen parece haber aprendido de los “errores” cometidos en los primeros modelos ID, cuyos interiores parece que han decepcionado en cuanto a materiales, ajustes y acabados. Así, en el ID.7 la cosa cambia por completo.
La notoria comodidad y confort de viaje que promete el interior a primera vista se ven acompañadas igualmente con un elevado nivel de equipamiento y con las habituales calidades de acabado características de la marca Volkswagen, sin duda la generalista más premium de cuantas se pueden encontrar en el mercado, con ajustes y tolerancias mínimos, materiales de calidad y muy agradables al tacto,… y su habitual sobriedad germana que tanto gusta a los automovilistas en general y a los españoles en particular. Sin estridencias y con tonalidades cromáticas adecuadas en guarnecidos y tapicerías para gustar y agradar en todo caso.
VW recupera su calidad de acabado interior
El diseño del salpicadero, de líneas rectas y muy horizontales, crea un conjunto acogedor, con las salidas de aire también diseñadas muy planas y horizontales y especialmente bien integradas con las gran pantalla central, sin duda el elemento que más llama la atención al subir a bordo por su gran tamaño. De 15“, va dispuesta en la zona central del salpicadero. La pantalla integra en ella los mandos de la climatización e incorpora retroiluminación en las barras que permiten subir o bajar la temperatura en las distintas zonas de actuación de la climatización de manera que basta rozar la superficie con el dedo para manejarlas.
Si la pantalla del equipo de infoentretenimiento a bordo destaca por su tamaño, el cuadro lo hace justo por lo contrario. De pequeño y muy contenido tamaño. va sobriamente recogida tras el volante y bajo el bisel del salpicadero, lo que hace que su información quede prácticamente reservada en exclusiva para el conductor del vehículo. Este tendrá una gran ayuda en el Head-Up display con tecnología de realidad aumentada que ofrece el ID.7 y que se antoja necesario dadas las dimensiones del cuadro para recibir la información básica del vehículo en orden de marcha. La que proyecta sobre el parabrisas el Head-up es realmente dinámica, muy completa y también bien legible, gracias a que el área de proyección es bastante amplia. Sin duda un gran avance frente al funcionamiento de estos dispositivos en otros modelos de la marca.
Elevalunas en los ID siguen sin convencer
Mencionar también los mandos elevalunas que tanto están incomodando a los usuarios de los modelos ID para abrir o cerrar las ventanillas traseras. El ID.7 reproduce el mismo sistema que se emplea en los ID.3, ID.4 e ID.5 y obliga a pulsar previamente un mando táctil antes de poder activar el funcionamiento de las ventanillas traseras.
El ID.7 cuenta además con una climatización interior en la que el funcionamiento de su sistema de aire acondicionado ha sido objeto de especial estudio por parte de los ingenieros de la marca para favorecer la mejor circulación del aire en todas las plazas a bordo.
Pero si algo destaca a bordo del nuevo ID.7 sin duda son nuevos asientos premium Ergoactive que se ofrecen como opción adicional al equipamiento de serie y que contribuyen de manera excepcional a disfrutar del máximo confort a bordo de la berlina alemana. Se trata de una nueva generación de asientos delanteros que combinan alcanzar este a la vez que proporcionan innovadores programas de masaje, climatización automática y una avanzada función de estimulación de los grupos musculares que afectan tanto a la columna vertebral como a la zona pélvica del conductor y su acompañante.
Asientos, mejor los opcionales, con masaje y climatización
Desarrollados en colaboración con la campaña alemana de salud que postula por una espalda más sana (AGR), los nuevos asientos cuentan con hasta 10 cojines de aire que son utilizados para efectuar las funciones de masaje en los adecuados puntos de presión. Esto se consigue básicamente gracias a dos cojines de aire ubicados en el asiento que funcionan de manera alternativa y en combinación con la habitual función de masaje en los asientos, de manera que se logra aliviar la tensión en la espalda y evitar que el ocupante permanezca sentado en la misma posición durante mucho tiempo, aliviando así las cargas y tensiones que se producen durante los viajes de largo desplazamiento al favorecer una posición sentada dinámica y favorable para la espalda y sus articulaciones.
Los asientos pueden regularse en hasta 12 distintas posiciones y cuentan con ajuste manual de profundidad en la banqueta en dos posiciones con soporte para los muslos, así como con memoria para mantener las posiciones favoritas de las personas que habitualmente viajan en ellos. Igualmente están dotados del sistema Climatronic adaptativo, mediante el cual la calefacción de los mismos se activa por defecto tanto para calentarlos como para airearlos en los días de mucho frío o mucho calor.
Los pasajeros de la segunda fila de asientos también disfrutan de asientos de esta tecnología. En su caso las funciones cuentan con tres posibles ajustes para calentar tanto los cojines como los respaldos de los asientos. Los mandos para su control se encuentran ubicados en la consola central. Como decíamos, los asientos se ofrecen opcionalmente integrados en el pack opcional interior Plus por 4.450 euros, el cual también incluye el sistema de sonido Harman Kardonn de 700 vatios con 14 altavoces de alta gama distribuidos adecuadamente por el interior del vehículo, con un altavoz central delantero y un subwoofwer en el maletero entre ellos, así como con el sistema de iluminación ambiental interior que ofrece hasta 30 colores y tonos diferentes entre los que poder elegir la que más apetezca disfrutar en cada momento.
Con el ID.7 Volkswagen busca recuperar la senda de las berlinas con carácter e imagen deportivo que caracterizaron a la marca previamente al actual proceso de descarbonización que vive el mercado, un carácter del que ya dio muestras con el ID GTI concept que mostró en el Salón de Münich y en el que recupera el estilo de vida que preconiza el puro ADN de la marca: placer de conducción, estilo de vida, carácter, diseño, deportividad, etc.
A la venta en febrero, reservas ya abiertas
El ID.7 se pondrá a la venta antes de la primavera de 2024 y tendrá una segunda carrocería, la ID.7 Tourer (versión familiar, combi, break, SW o como se la quiera llamar) que llegará en el otoño de ese mismo año. La nueva berlina se convierte así en el sexto integrante de la nueva familia eléctrica ID. de la marca de Volksburg. Inicialmente, Volkswagen tiene prevista su comercialización en los distintos mercados de Europa, China y Norteamérica en los que está presente.
Con el ID.7, Volkswagen “retorna” al mundo de las berlinas, abandonado por la marca tras el anuncio de la desaparición del Passat y del Arteon, modelos a los que reemplazará. Será la única berlina de la marca alemana a la venta en los mercados europeos y, por tanto, no tendrá comparación con otras dotadas con motores de combustión. Se trata de una berlina de gran tamaño, de 4,96 m de longitud con voladizos muy cortos y las ruedas situadas muy en los extremos del coche.
Elaborado directamente a partir de la plataforma MEB para coches eléctricos de gran tamaño del Grupo Volkswagen, la gama de la berlina se articulará inicialmente en dos versiones de acabado, Pro y Pro S, a las que más adelante se le añadirá otra variante de carácter aún más deportivo, la denominada GTX. Ambas estarán disponibles con los dos niveles de capacidad de batería que Volkswagen ha previsto para el ID.7, de 77 y 86 kWh, la primera con una capacidad de carga de 170 KW y la segunda de 200 kW, ambas en CC.
Hasta 700 km de autonomía
Para reducir los tiempos de parada durante las recargas, los usuarios del ID.7 podrán pre-acondicionar estas para que trabajen a la temperatura óptima y dotarse de la mayor capacidad de carga posible, esas con las que Volkswagen declara autonomías de 615 km para la versión Pro y de 700 km para la Pro S, lo que augura un consumo combinado de 14,1 kWh/100 km así como una autonomía en ciudad de aproximadamente 700 km (unos 620 km para el ID.7 Pro con la batería de 210 kW (286 CV) .
El equipamiento de serie que ya se ha decidido para las versiones ID.7 Pro, las primeras que se pondrán a la venta, incorpora entre otros elementos asistentes como los de aparcamiento inteligente Park Assist Plus con ayuda al aparcamiento, de cambio de cambio de carril Side Assist, de salida del aparcamiento, de advertencia de apertura de puerta, de frenada de emergencia Front Assist con sistema de detección de peatones y ciclistas, sistema de conectividad Car2XX, Climatizador Air Care Climatronica con regulación trizona de temperaturas, y mandos en plazas traseras, control de crucero adaptativo ACC, control por voz, faros LED, función de frenada de emergencia y asistente para evitar obstáculos, head.up display con realidad aumentada, iluminación ambiental en 10 colores, cargador de dispositivos móviles por inducción, llantas de aleación ligera de 19”, luces de orientación con proyección del logotipo, pedalier en acero inoxidable, sistema de cierre y arranque sin llaves Keyless Acces, sistema de control de presión de neumáticos, sistema de detección del cansancio y distracciones del conductor, sistema de navegación, de reconocimiento de señales de tráfico, Travel Assist con asistente de mantenimiento de carril (Lane Assist) y de emergencia (Emergency Assist), volante multifunción térmico con control táctil, eCall, y el sistema de visión periférica 360 Area View con cámara de visión trasera.
Desde 61,900 euros
En cuanto a sus precios, la familia de los ID.7 estará por encima de los 60.000 euros, El ID.7 Pro vendrá a costar unos 61.970 euros y llegará en febrero de 2024. El ID.7 Pro S estará a la venta a inicios del verano, ya arrancado el segundo semestre, aunque por lo pronto se desconoce su precio, al igual que el de las futuras versiones GTX y de los ID.7 Touring que presumiblemente comenzarán a estar disponibles a finales del próximo año.